Ardiente, explícito y muy pasional, como para que se te olvide respirar.
La protagonista (Nikki) no es que sea más sumisa, es que es conformista, dentro y fuera del dormitorio y se abstrae de la realidad con una facilidad increíble, están sucediendo a su alrededor un montón de acontecimientos, que harían saltar las alarmas de cualquiera y ella sigue pensando tranquilamente… en su nube, sin darse cuenta de que todo lo que pasa también la afecta a ella, por mucho que su Damien lo intente arreglar después.
Damien tiene una evolución en la trilogía, pasa de caballero negro a caballero de brillante armadura y en esta se convierte en don Quijote de la Mancha, capaz de luchar contra molinos de viento por su Dulcinea pero Damien acaba mejor que él, porque su amada acude en su ayuda sin dudarlo.
Quiero destacar de esta trilogía la capacidad de la autora para conseguir que cada final sea más intrigante y apasionado que el anterior, me encantan los finales tórridos que hacen que se acelere el corazón y se altere la respiración. He llorado y disfrutado mucho creo que mejor cierre no podía haber tenido esta historia. Me ha encantado.
Tengo que reconocer que en los anteriores libros dudaba si la sumisión de Nikki, además de un problema con el dolor, era pura vaguería y comodidad pero en esta entrega lo deja todo claro, descubrirlo vosotras.
Nosotras para definir los libros cuando los comentamos hacemos ciertas diferencias:
En cuanto al contenido erótico: suave – calentito – ardiente.
La forma de abordarlo: explícito – romántico.
La trama: ligero – intenso- pasional.