Reseña
«Y Llenarte el Muro de Flores»
de Laura Nuño y Helen C. Rogue
«Lo único que se le ocurre para conquistarte es dedicarte todos los días una canción en tu Face… y llenarte el muro de flores.»- Nacho.
Es una historia súper divertida y ligera. Te lo lees sin darte cuenta, cuando de repente te golpea el desenlace y te genera una sensación de asfixia, de la que cuesta recuperarse hasta que llega el aire del final.
Una cosa que me ha gustado es que la historia la cuentan ambos, pero el protagonista real es él, Nacho. Él es el narrador la mayor parte de la novela, y me encanta.
Nacho cuenta su historia a su manera y es una grata sorpresa, me gusta la mezcla de la robustez de su carácter y como cuenta su lucha interior por no delatar sus sentimientos desde el primer momento.
«Un hombre de verdad hace que mojes las bragas, no los ojos.»-Nacho.
Como es su historia, también habla de la paternidad, de los sentimientos que le produce y de la forma en la que la entiende y como la vive, no solo como padre sino como hijo.
«Al segundo, estaba llorando como el niño que nunca fui, o como el niño que todavía seguía siendo, en los brazos de mi padre … y, como tal, mi sufrimiento era el suyo.»- Nacho.
Nacho es un hombre que hasta el momento no se había enamorado nunca, solo conocía el amor fraternal. Ese es el motivo por el cual detecta en el primer instante que se enamora, cuales son sus sentimientos y desde ese momento comienza a pensar solo en amar y proteger a Noelia.
«¿Sabéis lo que es el paraíso? El paraíso era tener a Noelia semidesnuda, a mi merced, y yo a la suya.»- Nacho.
Noelia tiene algunos asuntos por aclarar con su pasado, algo que la aterra y la debilita haciendo perder la razón a Nacho al verse excluido. Pero como se suele decir lo que no te mata te hace más fuerte, ella termina resolviendo y superando sus carencias.
«Pero yo, egoísta de mí, sentía un dolor en el pecho al sentirme rechazada.»- Noelia.
La otra protagonista de la historia es la sinceridad, no, mas bien es la ausencia de la sinceridad. Entre ellos no se mentían, pero omitían la verdad y es el fallo recurrente de ambos, las piedras del camino que se colocaban ambos, sin darse cuenta de que eran ellos mismos los que se obstaculizaban su camino. Sin embargo las consiguen esquivar y así poder avanzar.
«A pesar de que la mitad de mi corazón le pertenece, la otra mitad clama tu nombre.»- Nacho.