Sinopsis

Gideon no es solo el nuevo docente de Selene, también es el tipo más sexy y brillante que nunca ha conocido y vaya forma de conocerse… Te pondré en situación: de noche, con alguna copa de más y en un bar de motoristas donde todo acaba a bandazo limpio. Claro que aquello fue mucho antes de saber que volverían a encontrarse en el Prescott College como profesor y alumna.
Desde ese momento, las fuerzas naturales de la atracción y la repulsión juegan con ellos.
La normativa de la universidad prohíbe las relaciones entre el profesorado y sus estudiantes. Gideon necesita ese trabajo para dar una estabilidad a su vida que lleva largo tiempo buscando, y Selene aún no ha encontrado su sitio; sin embargo, entre ambos saltan tantas chispas que solo con las miradas del uno sobre el otro podrían iluminar el espacio exterior.
¿Crees que no es suficiente lío? Pues espera, porque a todo esto se le une el novio, o mejor dicho, exnovio de Selene abandonándola por su mejor amiga, un mariscal macizo que debe hacer penitencia, el extraño suicidio de la antigua profesora de filosofía que Selene descubre, cuatro hermanos muy peculiares, una compañera deslenguada y muchas, muchas situaciones comprometidas con déficit de vestuario.
¡Adelante! El conjunto completo batido y servido dentro de las páginas de este libro.
Hace tiempo que no escribo reseñas y estoy algo oxidada, espero que me perdonéis y que consiga transmitiros lo que he sentido, al leer esta novela.
La escritora consigue con este libro azuzar muchas emociones, llevándote de una a otra, a cual más dispar, sin apenas tiempo para asimilar, si ríes, lloras o te asustas. Sí, te asustas, porque tiene una trama inquietante que se sale del típico cliché, de la atracción ente docentes y alumnado, que te mantiene intrigada y pegada a la tablet.
Es una novela erótica, que comienza con una gran tensión sexual no resuelta entre los protagonistas, y como podréis imaginar, finaliza con una gran carga erótica, no por la cantidad de escenas explicitas sino, por la intensidad de estas y las circunstancias que las rodean. Es una pena que no pueda desarrollar este comentario, para evitar spoilers, porque es un tema muy interesante para tratar de forma distendida.
Yo dividiría la novela en dos etapas, la primera en el campus universitario y todo lo que le rodea. La segunda sería «fuera», es otro «mundo» totalmente distinto del que más tarde os cuento.
La etapa universitaria es muy fresca, divertida, sexy. En ella es donde se conocen los protagonistas, Gideon y Selene, profesor y alumna. Se desarrolla en el campus universitario al que pertenecen y en el que hacen cómplices de su tensión al resto; ya que utilizan las clases de filosofía para retarse y provocarse, creando un rol entre ellos que solo ambos, en un principio, entienden, aumentando la atracción con ese toque de peligro…
Una tentación prohibida, exhibida ante todos; una seducción estrangulada por las normas de la universidad que les impide excarcelar la energía que generan sus cuerpos cuando están cerca. No peséis que, solo es algo físico entre ellos. Porque lo que más les une es la admiración mutua, les inquieta todo lo que respecta al pensamiento del otro; dos mentes brillantes que se desafían y excitan intelectualmente, ya que físicamente no pueden. Son muy interesantes sus clases.
La segunda etapa es la más difícil de comentar, por evitar los spoilers, pero es la que más me inquieta. Es donde los personajes sufren una gran transformación, en contra de su voluntad; donde comienzan y desarrollan su relación, totalmente contaminada y coaccionada por los acontecimientos. Porque cuando en su relación solo debían liberar su propia tensión sexual, que tenían retenida, se ven obligados a incluir en esa liberación toda la rabia, impotencia, dolor, ira y coraje que les genera la situación en la que se ven envueltos. No puedo decir más.
Aún así Gideon y Selene mantean el temporal de forma admirable, es lo que tienen las personas inteligentes que, son capaces de aceptar y adaptarse a cualquier condición por muy adversa que sea.
Esto no quiere decir que la admitan, ya que, como os podéis imaginar, consiguen encontrar la salida aceptable, menos dolorosa, del fondo barranco aquel, donde os dije, en el anterior #estoyLeyendo, que los había dejado abandonados para escribir el post.