#estoyLeyendo
Azul Tormenta, Lluvia Añil
de A.V. San Martín.
Empecé a llorar ya…
Es el llanto contenido durante toda la novela, que ha brotado, de momento no es desconsolado, porque ya te vas preparando durante el transcurso de la lectura, pero, aun así, las lágrimas caen. Por ella, por él y por la rabia que genera el sin nombre.
Estas situaciones siempre crean impotencia a todos los que la sufren directa, e indirectamente, cuando llegan a conocerla; normalmente cuando llega ese momento ya es tarde. Realmente es tarde desde el primer momento, el primer golpe, el primer insulto…
Yo siempre me temo lo peor, me da la sensación no voy a dejar de llorar hasta que acabe la novela. Quizás no crea lo suficiente en el vínculo entre Alex y Ana, es un golpe muy duro el que tienen que superar y Alex, aunque es experto en encajar golpes, creo que para este tipo no se había preparado, ojalá aprenda sobre la marcha.
Por miedo a que este sea el último fan-art alegre, quiero recordar al Alex pícaro.