#estoyLeyendo
“El Amor me Persigue, Pero Yo Soy Más Rápida”
de Elisabeth G. Iborra.
¡Ja! Cayó.
Era imposible resistirse a alguien como él, un hombre que es capaz de estimular TODOS los órganos de tu cuerpo. O por lo menos la mayoría, además de los sexuales, el estomago y el hígado (Que le dan al vino… como si no hubiera un mañana) La sabe estimular y provocar el cerebro. Sí, sigue sorprendiéndome, porque normalmente ese comportamiento, solo se da en la etapa de la conquista. En este caso ella esta más que conquistada y la actitud prosigue.
Mar, la protagonista, ha caído en los brazos fuertes de David, y ya no se resiste. Aún de vez en cuando forzegea, pero ya… no creo que haya marcha atrás. Lo está asumiendo y disfrutando, a su manera, claro.
El amor, ya no es tan lento… Quizás, ella inconscientemente, redujo el ritmo de su marcha.
